¡¡¡SALVEMOS AL MOFLETES!!!

Bien mis lectores, igual que uno escribe para entretener o entretenerse, para dar a conocer su opinión o símplemente porque le da la gana, también hay que aprovechar los medios que internet, como red global de comunicaciones nos brinda con el fin de ayudar a otras personas, entidades o símplemente ayudar a salvaguardar la memoria histórica.

El caso que quiero comentar hoy aquí es el de un camioncito de bomberos, con muchos años y que unas personas no quieren seguir manteniendo en acto de servicio. Es lógico que con libreta en mano uno haga cuentas y vea que el vehículo está totalmente amortizado y que otro vehículo nuevo se podría amortizar en X tiempo y siempre sería mejor, más seguro, más equipado, más capaz...

Pero si así fuera, se acabaría el romanticismo del asunto, me importaría 3 gaitas y si he visto al camioncito no me acuerdo. Si así fuera, jamás habría aprendido nada del mundo del motor, tanto en lo que respecta al vehículo de consumo como al vehículo profesional y claro está, no tendría cientos de páginas sobre estos temas guardados como oro en paño en un baúl.

Os voy a contar hoy una historia, la historia de este camión, que vive en un pueblo de Asturias llamado Avilés.

Nació en tiempos de aparente luz, pues nuestra piel de toro había estado sumida en el caos de la destrucción y la vergüenza de la Guerra Civil que la sacudió durante 3 años, 3 años en los que los españoles dejamos de ser españoles para no ser personas. Además de matarnos entre nosotros, matamos empresas, matamos obras de arte, símplemente por no comulgar con unos pensamientos o un color. La Hispano tuvo una lenta agonía desde estos tiempos hasta su muerte en los años 40 en que fué vendida a Enasa.

Así murió la madre de nuestro amigo, la Hispano-Suíza. Pero igual que todo principio tiene un final y tras la tempestad siempre llega la calma, las ganas de nuestro país de salir adelante (aún a manos de quien prefirió la sangre a otras formas más legítimas de demostrar sus ideas y dar a elegir para su adoptación o no), hicieron que de Hispano-Suíza naciese ENASA y de ENASA, PEGASO. No fué una resurrección casual. En un país donde hace falta progreso, el transporte y las comunicaciones son necesarias. Si la muerte de Hispano-Suíza fué una consecuencia de guerra, Pegaso fué hija de la propia guerra.

El último desarrollo de la Hispano-Suíza en los años 40, el Hispano H66G junto a las acciones de ENASA y a posteriori de Wilfredo Pelado Ricart (para mí el mejor ingeniero de automoción que hemos tenido en nuestro bendito país), dieron lugar a los PEGASO I y II, más tarde conocidos como MOFLETES y que se fabricó con múltiples carrocerías.

Nuestro Mofletes, concretamente es un coche de bomberos, en activo desde 1956 hasta hace muy poquito en Avilés. Tras pasar a la "reserva", fué durante años el cuarto rey mago en las cabalgatas de SS.MM. los Reyes Magos de Oriente. Según últimas noticias, podría utilizarse tras su restauración para enseñar a los niños prevención de incencios en los coles.


Es por esto que os pido, que no dejéis caer la memoria histórica de este país en el olvido y ayudemos a mantener uno de esos cientos de detalles que la mantienen viva, que en España un día se hicieron unos automóviles, camiones y autobuses estupendos, que no deben caer en el olvido, porque igual que otras obras de arte como pinturas, esculturas y edificios, calles de ciudades que guardan mil y una historias, también la industria, en este caso automovilística, se encuentra formando parte de nosotros.

A continuación links con más detalles sobre cómo colaborar a la salvación de nuestro mofletes, últimas noticias sobre sí mismo y fotografías e información del propio Mofletes, tanto de su estado actual como su estado de origen:

Su "web" particular de pegasoqueestasenloscielos.com:

http://www.telefonica.net/web2/juanramonsanchez/mofletes/mofletes.htm

El blog del propio Mofletes de Avilés:

http://aviles.cuadernosciudadanos.net/mofletes

Un saludo y gracias por entreteneros con esta entrada, como llamada a la conciencia colectiva del pueblo español ;)...

Géminis

El Hecho:

Todos somos Géminis, el mundo es géminis, gozamos de doble personalidad y no nos damos cuenta de que en este mismo plano del universo existimos nosotros con nosotros mismos.

Es algo que está ahí y todo el mundo lo sabe, pero nadie se da cuenta.

La Teoría:

Existimos "yo" y "conmigo mismo", es decir, el yo que nos expresamos y el yo que nos entendemos, el que nos dicta lo que está bien, lo que está mal, hechos relativos a la coyuntura ambiental que nos rodea ¿cuántas veces pensamos "llueve" y luego como unos canelos hablamos "llueve"?. Está clarísimo que el ser humano es un bicho que tiene miedo de estar solo y ante la soledad, la duda o símplemente porque le da la gana, se monta historias consigo mismo.

Y si no hablásemos con nosotros mismos, haríamos monólogos que se estampanarían en la soledad de las paredes, que viendo que no dan respuesta, terminaríamos estableciendo una conversación con nosotros mismos. Osea, más de lo mismo.

El Ejemplo:

Cuántas veces habremos abierto el armario:

- YoInt: ¿Qué ropa me pongo?
- YoInt: Ah pues el jersey negro
- YoInt: Mmmm pero si hace mucho sol y eso se calienta mucho... Mejor me pondré una camiseta más fresquita

Ahí tenéis, un claro ejemplo de un sujeto que ante la duda de cómo vestirse, espera la autorespuesta de su yo más interior y hasta que no recibe respuesta o silencio por parte de este, que apruebe su decisión, no desiste.

Hay muchos más supuestos, como el mencionado de la lluvia:

- YoInt: Llueve.
- Yo expresando: Está lloviendo!

A veces nuestro yo interior intenta ser nuestro mejor aliado para subirnos el autoestima. O antes de un examen:

- Yo para mí mismo: ¿Aprobaré?
- YoInt: Si, claro, llevas 2 semanas estudiando.
- Yo para mí mismo: Pero debí haber empezado hace 2 meses!!!
- YoInt: Pero 2 semanas son 2 semanas.

Hay supuestos en que nuestro "yo interior" es un poco cabrón haciéndonos quiebros con unos pensamientos y cambiándolos por otros a la hora de expresarnos, como cuando se planta la rubiaza esa de ojos azules al lado nuestra:

- YoInt: Qué guapa, qué ojos qué...
- Yo expresando: Hola te ví y me gustó tu culo digooooo tus ojos...
- Yo para mí mismo: ¬¬ jodido yo interior...
- YoInt: te jodes como Herodes...

Bueno pequeños lechones, si alguno ha pasado por aquí alguna vez y vuelve a caerse en estos lares, que sepa que VUELVO!!!!

Facultad, oposiciones y trabajo dejan poco tiempo para mi persona, pero qué #$&?! a vosotros no os tengo que dar explicaciones xD...

A los nuevos: VOLVEREMOS EN BREVE...

Y a ver si tocamos un poquito la apariencia de la web que anda un poco oscura... demasiado stándar xD...

Abrazos para ellos y besitos para ellas wawawa

2omeo...

Delirios de Grandeza...

Dia 2 de Universidad:

Hoy es viernes, no es un día cualquiera, porque los viernes en manitas sin fronteras me esperan sentadicos, pero... hay que ir a ver a Uri, a hacerme el examen semanal de las oposiciones que me estoy preparando, a ver si las apruebo y me largo a vivir a la costa, feliz como un regaliz...

13.00 horas, todavía no he empezado a hacer el programa que Chanquete pidió para hoy. ¿Qué era? Ah si, en la sección 5 del nivel 3 de mi cerebelo pone que había que meterle por teclado un número y leerlo a caracteres y convertirlo a número.

Hace tiempo que no uso el portátil, para programar está genial, así que me puse a crear (que bien suena), esa maravilla requerida por una mente tan aparentemente privilegiada como la de Chanquete.

ouuuuuuuuuuuuuups... algo aprieta ahí abajo, tardaba en llegar al baño y me preocupaba que pasaría con el programita, no podía perder el tiempo... pero el portátil es portable y yo soy inteligente, además de multitarea, podría crear sustancia orgánica en el baño mientras programaba. Y así fué...
Creada dicha sustancia y parido parcialmente el programa, me puse raudo y presto a pasar dicha creación al pendrive para imprimirla. Ya tenía hechos los deberes.

17.00 horas, de repente, mi creación se ve por los suelos, el mal endémico de todo programador se cumple una vez más, el futuro dueño del software cambia las especificaciones a su antojo. Digo el mal endémico, por no mencionar a Murphy, que tendrá otro día de desarrollo con cosas tan interesantes como el temidísimo "efecto prueba".

Resulta que en cuestión de momentos aquí el colega ya no lee de teclado, sino de un fichero. Le ha crecido la inteligencia y nos lo piensa demostrar, espero que el resto de compañeros (14, QUE EXITO!!!) se enteren de lo que este hombre quiere mostrar al mundo.

Chanquete ha resuelto el programa en 2 líneas, prácticamente (hablo en sentido figurado, para los menos avispados) y nos lo muestra orgulloso, lo que a mí, personalmente, me asusta.

Poco más tarde, continuaron los delirios de grandeza "Leerme este fichero y me lo copiáis en otro". Acto seguido pintó el fichero con el nombre dentro.

El silencio se apodera del aula, nadie dice nada, por lo que decido hacer uso de mi sociabilidad y participar en clase, esperando iluminar alguna cabecita, además de la mía misma:

|2omeo: "pues mientras que no sea fin de fichero, lo vas leyendo y..."
Chanquete: Ahhhhhh no, imposible ¿Y si llega a estar vacío?
|2omeo: Tócate los huevos... (pienso) ¿Y si no llega a existir?
Chanquete: Acostúmbrese a que quien hace las preguntas soy yo...
|2omeo: Spain is different (sigo pensando)

Empezamos a asistir a clase...

En manitas sin fronteras todo va aparentemente bien, trepas anda un poco jodido de la espalda, mi paquetito de 8 pc's nuevos sigue aguardándome con cariño a la espera de que termine de configurarles y despacharles, los jefes no están bordes...

El mosqueo viene cuando se divisan un par de bandos que se atacan contínuamente por los flancos, cuando eso pasa en una empresa y tú estás un poco ajeno a todo, es una putada, porque fijo que alguna hostia te la llevas tú. Yo todavía no me he llevado nada de nadie, madera toquemos.

Hace días empezaron las clases, yo formalicé mi matrícula exactamente el viernes pasado, después de unas merecidas vacaciones.

Empezamos con un cóctel de Álgebra y programación.

La de álgebra es una señora de pelo blanco, alta, pispireta y con mu mala leche, es una histérica empedernida, lo sé porque era la que tenía en prácticas el año pasado. Qué cagada, pensé.

Pero no. La gran cagada es programación I.

Ya de por sí, es una ofensa para un programador como yo presentarse a esta asignatura. Pero aún se puede rizar el rizo. A este profesor le llamaremos Chanquete. Es regordete, pelo blanco, aparentemente feliz y de 2 días que lo he visto, 2 días que lleva la misma ropa.

Chanquete es un tío muy tranquilo, casi tan tranquilo como un día sin pan, sin nada que hacer, tan tranquilo, que no es raro dormirte en clase.

Yo al principio lo tuve como un tío inteligente, a pesar de todo, pero qué gran cagada. La mierda de Pascal y quienes dan clase (2 de 2 indican que el 100% son unos fracasados, con perdón para las excepciones que confirmen mi hipótesis).

El muy melón pretendía que pensáramos un programa en Pascal: Leer un número 1465 (por ejemplo) en carácteres y pasarlo a números...

Al principio, todo genial, una aplicación muy loable para aprender a usar bucles, la función ord y cosas así... Una aplicación que con 2 bucles se hace, incluso con uno si se pone a darle uno al coco, pues el muy melón pretende dar una vuelta de bucles con cada carácter (textualmente dicho por), claro, si el pc no se cansa!!!

Recapitulando un Martes...

Hoy, Martes 27, toca un poquito de filosofeo barato. Y es que os voy a soltar un rollo sobre la confianza...

¿Por qué las personas a veces perdemos hasta la confianza en nosotros mismos? Yo la verdad, que la estoy empezando a perder y no me gusta, así que: o me veo atándomela a una pierna para que no se escape, o buscándola por ahí, a saber por dónde se perdería, yo soy una persona propensa a desconfiar, no porque dude de la gente, sino porque me han dado leches por doquier... tantas, que de bueno tonto. En algunos momentos prefiero que piensen que soy un poquito borde y/o desconfiado, a que me las den con queso.

Hoy mismo, un trepas que se nos ha colado en la empresa, por la técnica del enchufing (muy típica aquí en España, práctica y eficaz, sobre todo para el enchufado), me dí cuenta que la confianza la mayoría de las veces es por algún tipo de interés, que en algunas ocasiones desconozco. El trepis tiene confianza con mi jefa para tener su contraseña personal y yo, que soy el informático, NO. Mola que me acabo de enterar que trabaja en su casa... de qué cosas se entera uno, oiga...

Claro, es normal que haya trepas en las empresas, cada día me doy más cuenta de ello. Nos empeñamos en meternos con ellos por ser así, monchitos (sip, me encanta Fukowsky, el hombre tiene más razón que un santo en todo lo que dice), con las manos de los jefes metidas hasta el esófago... pero claro, es normal, sólo son buitres de oficina, títeres de los que verdadera y realmente manejan el cotarro: Los jefes, esos vampiros chupópteros, esos son los que matan, los que se aprovechan según creen hasta saciarse, dejando los restos para los buitres. Lo gracioso es que a veces la carroña son ellos y otros buitres son quienes se los comen.

Hay que joderse, al final el pastel se lo zampan los buitres...

Menos mal que me doy cuenta, un día más que esto es generalizado y no solo en mi empresa, gracias a mi compañero de batalla wardog. Os recomiendo que le visitéis, aprenderéis más cosas, sino más que conmigo.

A veces en lo personal, los desconfiados somos nosotros, cuando vemos que algo o alguien a quien queremos se encuentra en una situación comprometida, porque en el fondo, aunque no queramos, somos egoístas y queremos eso o a esa persona sólo para nosotros, decimos cosas y actuamos sin pensar, sin mirar un poco más allá de nuestras narices. Hacemos daño y no nos damos cuenta hasta que abrimos una herida. Tristemente, las mejores relaciones, crecen a base de heridas, cicatricadas entre tu mismo y esa persona, pues si realmente la aprecias, vas aprendiendo a no abrir más heridas o lo que es peor, la misma herida ya cicatrizada. Ojalá todos aprendiésemos de nuestros errores antes de cometerlos, llegados a este punto sólo le queda a uno disculparse y aprender, insisto, pues es la base del conocimiento de toda persona, dejando a un lado defectos tan virtuosos como la tozudez y la ceguera de no saber que tiene uno delante.

El último párrafo es para mi Sue...

Un saludo.